¿Qué son?

Los sistemas expertos legales son programas computacionales que, alimentándose desde una base de datos de información técnica preparada por expertos en una materia y ordenadas mediante un sistema de normas de inferencia, proveen información con soluciones específicas a consultas de carácter legal. En otras palabras, un sistema experto es un software que responde a preguntas de relevancia jurídica.

Cómo ejemplos de sistemas expertos exitosos podemos mencionar Turbotax, que ofrece consejo, asesoría y declaraciones tributarias para personas mediante su aplicación web, Project CALC, que provee un asistente automático sobre la regulación de constructibilidad para arquitectos mientras diseñan en Autocad.

 En otras palabras, un sistema experto es un software que responde a preguntas de relevancia jurídica.

¿Qué elementos componen un sistema experto legal?

Los sistemas expertos legales están compuestos por tres elementos: una interfaz gráfica, una base de datos de conocimiento, un sistema de inferencia.

La interfaz gráfica, también conocida como GUI – Graphical User Interface – corresponde a lo que se ve concretamente en la pantalla del programa y es aquí donde el usuario interactúa con el sistema experto, tanto insertando información cómo recibiendo respuestas.

El ingreso de información puede adoptar la estructura de un formulario digital, una sucesión de preguntas y respuestas, o bien un chatbot (básicamente un chat en el que te contesta un robot). La misma interfaz gráfica luego irá orienta a un usuario sobre la aplicabilidad de determinadas normas de cierto a un caso concreto.

El mayor desafío de las interfaces gráficas es ser humanamente intuitivas y didácticas. Deben ser diseñadas tomando en cuenta el conocimiento y psicología del usuario y deben realizar las preguntas indicadas permitiendo éstas ser respondidas idealmente mediante argumentos predefinidos seleccionables, respuestas numéricas, o bien campos dinámicos.

La base de datos de conocimiento jurídico es la fuente de información sustantiva que alimenta el sistema experto legal. Dependiendo de la modalidad que adopte el sistema de inferencia, el conocimiento podrá estar almacenado – para aquellos sistemas basados en reglas – en frases, párrafos y sentencias predefinidas. Para aquellos sistemas de inferencia basados en métodos estadístico, análisis de datos e inteligencia artificial, la base de datos de conocimiento jurídico tomará la forma de contratos, sentencias judiciales, u otros cuerpos de texto que dependerán de la materia que trata el sistema experto y serán la fuente de alimentación del sistema de inferencia.

La base de datos de conocimiento es, en otras palabras, el contenido sustantivo que entrega el sistema experto legal. Así, por ejemplo, un sistema programado para determinar la jurisdicción y tribunal competente en materias de litigios estará alimentado por una serie de normas procesales y frases pre-escritas, algunas de las cuales serán comunicadas al usuario al momento de formular las preguntas y, aquellas pertinentes al problema revelarán la respuesta a la pregunta jurídica del usuario.

La calidad de un sistema experto legal depende, en gran medida, de la calidad y claridad del conocimiento sustantivo que haya sido programado en él. En este sentido, el desafío para el profesional jurídico está en saber traducir correctamente el conocimiento jurídico en sentencias lógicas capaces de ser comprendidas por el software.

El sistema de inferencia es corazón del sistema experto pues el motor lógico que generará las respuestas a partir de la base de datos de conocimientos y proveerá de contenidos relevantes al usuario. Los sistemas de inferencia se pueden dividir generalmente en dos grupos: Por un lado, los sistemas basados en reglas predeterminadas e IF statements y por otro lado los sistemas estructurados en base a análisis de datos mediante herramientas estadísticas o de inteligencia artificial.

Sistemas de inferencia basados en reglas e IF statements.

Un IF STATEMENT” es básicamente una sentencia de un programa que ejecuta una acción dependiendo de una condición. Si “A”, entonces “B”.

Los sistemas programados en base a reglas llegan a determinadas conclusiones a partir de un set de inputs de información y sus correspondientes alternativas previstas en el código.

Debido a su estructura lógica deductiva, los sistemas expertos basados en reglas se pueden representar como un árbol cuyo tronco de preguntas centrales se va dividiendo, según sus variables, en ramas de posibles soluciones y respuestas. Esto los hace relativamente sencillos de programar y sirven principalmente para trabajar con fuentes de información de carácter binario o cuantitativo cuya existencia y magnitud no son discutibles ni dependen de la consideración normativa de ciertos términos.

Un ejemplo de esto es la conversión de una sentencia normativa cómo el artículo 26 del Código Civil

Código Civil, Artículo 26. “Llámase … mayor de edad, o simplemente mayor, el que ha cumplido dieciocho años; y menor de edad, o simplemente menor, el que no ha llegado a cumplirlos.”

en una formulación lógica en base a IF Statements.

Mayoria_edad = 18 Juan_edad = 19   if Juan_edad >= Mayoria_edad:    print(“mayor de edad”) else:    print(“no es mayor de edad”)

Los sistemas lógicos basados en reglas tienen dos limitaciones básicas:

  • La combinación de variables puede ser muy numerosa, lo que lleva a un aumento exponencial de la cantidad de ramas (soluciones posibles). En otras palabras, si el problema jurídico comprende la combinación e interacción de muchas variables, entonces la cantidad de soluciones puede ser muy alta, lo que lleva a que la programación de cada una de las ramas sea una tarea muy costosa en tiempo y trabajo, o bien a una serie de combinaciones en exceso numerosa que haga imposible su programación.
  • Existen variables cuya definición depende de una apreciación cualitativa de la autoridad. En numerosos casos la ley apela a conceptos normativos que sólo son definidos por el juez atendido a los hechos del caso concreto. Así, resulta a veces imposible programar ex ante, respuestas a eventos cuya apreciación cuantitativa o binaria depende de la determinación que realice la autoridad en base a consideraciones no determinables de forma previa

Sistemas expertos estructurados en base a análisis de datos mediante herramientas estadísticas o machine learning.

Cómo contrapartida a los sistemas basados en reglas, los sistemas expertos estructurados en el análisis de datos no poseen un menú de respuestas escrito de forma anticipada, sino que están programados para analizar matemáticamente una gran base de datos de información que sirve de ejemplo, el dataset, y en base a ese entrenamiento, crear un modelo que permite extraer conclusiones y sus múltiples probabilidades derivadas del contraste entre un nuevo ejemplo y el dataset.

La operación de conversión de una sentencia normativa cómo el artículo 26 del Código Civil se vería conceptualmente de esta manera:

dataset = “escrituras públicas donde figura la fecha del contrato, la fecha de nacimiento de las partes y la mencióna que son personas mayores de edad” Modelo = “99 por ciento de las personas de 18 años o másque comparecen en los contratos es referida también como “Mayor de edad” ” Input = (María = 19 años) Output = “99% de probabilidades de que María sea “Mayor de edad””

Los sistemas basados en análisis estadístico e inteligencia artificial han adoptado popularidad en los últimos años principalmente gracias a la continua disminución en el costo de cálculo y almacenamiento de datos y a la propagación de algoritmos open source para llevar a cabo tareas de machine learning.

Dentro de los sistemas expertos basados en machine learning podemos mencionar un modelo predictivo de las decisiones de la Corte Suprema de Estados Unidos o algunas de las funciones de análisis de contratos del software KIRA.

El desafío con los modelos basados en análisis de datos y machine learning es que por su complejidad técnica requieren un equipo avanzado para su desarrollo. Por otro lado, el entrenamiento de un modelo predictivo requiere de gran cantidad de datos lo cual no siempre es fácil de obtener cuando la información consta en cientos de miles de documentos y contratos más o menos confidenciales.

 ¿Hacia dónde vamos con los sistemas expertos legales?

Los sistemas expertos no son nuevos en el mundo legal, sin embargo, hasta antes de la última gran crisis financiera, tal vez no prosperaron debido a la falta de incentivos económicos para su introducción. Hoy, la disminución de los costos tecnológicos y la presión de contar con herramientas más eficientes y menos costosas de acceso a información de carácter legal han impulsado con fuerza su renacimiento.

En nuestra opinión, un sistema experto no reemplaza por sí solo la labor de asesoría jurídica a medida. Los sistemas expertos son un nuevo producto que permite a los estudios de abogados rentabilizar de manera novedosa el conocimiento de sus juristas.

Los sistemas expertos son un nuevo producto que permite a los estudios de abogados rentabilizar de manera novedosa el conocimiento de sus juristas. 

Permiten abrir nuevas líneas de negocio y ayudan a focalizar el trabajo de asesoría a medida, bajo horas facturables, para aquellos casos complejos que generan mayor margen de utilidad para la firma. Importantes estudios de abogados extranjeros ya han adoptado esta estrategia ofreciendo productos, por sobre todo en el área de cumplimiento, que se agregan a su oferta de servicios tradicional y generan retornos nuevos. Al mismo tiempo, para las empresas puede resultar muy útil tener complementar la asesoría de sus abogados con el acceso a sistemas expertos ya que con ello puede ahorrar importantes costos en solución de consultas jurídicas rutinarias y frecuentas cuya lógica de respuesta resulta automatizable.

Los comentarios y preguntas son bienvenidos a mi correo [email protected]

Diego Maldonado Rosas

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